Un incidente ocurrió en el Aeropuerto Internacional de Nashville cuando un avión de Alaska Airlines casi colisiona con otro perteneciente a Southwest Airlines.
Según reportes de la prensa local, el vuelo 369 de Alaska, que se dirigía a Seattle, había recibido la autorización para despegar, mientras que el vuelo 2029 de Southwest fue autorizado a cruzar la misma pista.
Este error de comunicación en la torre de control puso en peligro tanto a los pasajeros como a la tripulación de ambos aviones, y pudo haber costado la vida de muchas personas. Afortunadamente, todo quedó en un aterrador susto, y nadie salió herido.
Trascendió que los pilotos de Alaska Airlines se vieron en la obligación de abortar el despegue de manera abrupta, lo que provocó que los neumáticos estallaran debido a la intensa frenada necesaria para evitar la tragedia.
A pesar de la situación crítica, la tripulación logró sacar el avión de la pista, acercándolo a la terminal sin que ningún pasajero resultara herido.
Vale la pena resaltar que un total de 176 viajeros y seis miembros de la tripulación se encontraban a bordo, y todos ellos pudieron desembarcar sanos y salvos.
Entretanto, la Administración Federal de Aviación (FAA) informó haber comenzado las investigaciones correspondientes en colaboración con la Junta Nacional de Seguridad en el Transporte para esclarecer las causas del incidente.
Asimismo, Alaska Airlines expresó su gratitud hacia la experiencia de sus pilotos, quienes actuaron con rapidez y eficacia para minimizar las consecuencias del casi choque.
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Además, se enviará un avión adicional a Nashville para transportar a los pasajeros a su destino original, Seattle.
En cuanto a Southwest, la empresa señaló que “nada es más importante que la seguridad de nuestros clientes y empleados”.
Se espera que, en las próximas horas, expongan nuevos detalles del insólito caso.
Redacción de Cubanos por el Mundo
