En los últimos días, el régimen de Cuba ha vuelto a protagonizar una cruda represión contra aquellos que ejercen la libertad de expresión, mediante una serie de citaciones a activistas e intelectuales.
Entre los citados se encuentran Jorge Fernández Era, quien en su momento expresó su intención de asistir a Villa Marista, y el historiador Alexander Hall, que también denunció la situación en su perfil de Facebook.
Asimismo, Raymar Aguado Hernández, otro activista, reveló que, en su citación, solo refutaría cualquier barbaridad o amenaza durante el interrogatorio, cumpliendo así con el deseo de sus padres de no verse involucrado en la represión.
Además, la profesora Jenny Pantoja fue objeto de un cerco policial por parte de la Seguridad del Estado, lo que demuestra que estas acciones no son aisladas.
Cada 18 de mes, el régimen intenta ahogar las manifestaciones pacíficas que activistas como Alina Bárbara López han promovido en la isla.
Pantoja, que mantiene su firmeza en cuanto a su derecho a la libertad de expresión, rechazó el cerco a su hogar, afirmando que tiene el derecho fundamental de moverse libremente.
“Saldré porque ellos no tienen autoridad legal para detenerme. El día que todos luchemos firmemente por nuestros derechos civiles, no podrán sostenerse más en el poder”, dijo en su momento.
A pesar de la presión ejercida, la académica declaró que cualquier documento firmado bajo coacción carece de validez y que no se convertirá en cómplice de los abusos del régimen.
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En Cuba, aquellos que manifiestan sus pensamientos, amparados por su derecho a la libertad de expresión, son tratados como los peores delincuentes del mundo.
Mientras tanto, aquellos que sí se pasean por las calles de la isla sembrando terror con sus fechorías, tienen plena libertad y no son perseguidos por absolutamente nadie.
Redacción de Cubanos por el Mundo