El pasado lunes 7 de octubre, la Fiscalía General de Bolivia, indicó que fue citado el expresidente dictador Evo Morales 2006-2019, para que rinda declaraciones sobre un caso de presunta “trata de menores” y “estupro”.
El izquierdista aliado del castrismo, deberá presentarse el jueves en la región de Tarija para rendir estas declaraciones.
El jefe del ministerio público, Juan Lanchipa, dijo a medios locales que aparte de Evo Morales, también han sido llamados los padres de la presunta víctima para declarar el diez de octubre en la fiscalía del departamento de Tarija.
El comunista, expresidente de Bolivia, recientemente fue señalado por el ministro de Justicia, César Siles, de estar involucrado en una investigación por la posible “violación” de una menor, en 2015, y con quien se dice habría tenido un hijo, en 2016.
Además, se le acusa de crear una red de jóvenes de entre 14 y 15 años para tener a su disposición durante su mandato, a la cual nombró “Generación Evo”.
El exdictador calificó la denuncia como “otra mentira más” y alegó en 2020 ya había sido investigado por los mismos hechos y que “se ha demostrado que no hubo nada”.
El caso de Evo Morales, vuelve al ruedo, luego de que fuera desempolvado su expediente por la fiscal del departamento de Tarija, Sandra Gutiérrez, la funcionaria ordenó la captura de Morales el 26 de septiembre, pero la orden fue anulada por una jueza que acogió un recurso judicial a favor del exjefe de Estado.
Ante esto, el fiscal general Lanchipa apartó de sus funciones a Gutiérrez por “conducta negligente”, sin embargo, la justicia la restituyó en el cargo y será ella quien tomará la declaración de Evo Morales el próximo 10 de octubre, así lo informó el jefe del ministerio público.
Evo Morales, enfrentaría de llegar a ser culpable una pena máxima de 20 años de prisión, que es la que fijan las normas para el delito más grave, en este caso es el de trata de personas.
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Redacción Cubanos por el Mundo
