En un emocionante y frenético inicio de la Serie Mundial, los Dodgers de Los Ángeles lograron superar a los Yankees de Nueva York con un resultado de 6 a 3.
El juego, que tuvo lugar el viernes, será recordado no solo por el marcador, sino por el grand slam espectacular de Freddie Freeman en la décima entrada.
No obstante, para el cubano Néstor Cortés seguramente será una jornada perfectamente olvidable (aunque es imposible) pues fue precisamente él quien recibió el impactante batazo que dio la victoria a Los Ángeles.
El encuentro comenzó con una tensa competitividad, con unos Dodgers pegando primero en el quinto tramo. Sin embargo, los Mulos dieron la vuelta al marcador con un soberbio cuadrangular de Giancarlo Stanton una entrada después.
En el octavo, Ohtani igualó las acciones gracias a un batazo de sacrificio de Mookie Betts, y el drama ya empezaba a reinar en el estadio.
En la parte alta del décimo episodio, gracias a una anotación de Jazz Chisholm Jr., los neoyorquinos picaron nuevamente adelante. Sin embargo, la determinación de los Dodgers se hizo evidente cuando llenaron las bases, creando una oportunidad crucial para cambiar el rumbo del partido.
Freeman, con su impresionante conexión, desató la locura entre los seguidores locales, quienes vieron cómo su equipo aguantó la presión y respondió con fuerza.
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De esta manera, los Dodgers se van al frente en una Serie Mundial que, como se recordará, definirá al mejor de siete partidos, es decir, el primero que se lleve cuatro victorias.
El segundo compromiso de esta serie se disputará este mismo sábado, también en la casa de Los Ángeles, que buscarán dar un golpe sobre la mesa.
Los Yankees, por su parte, empiezan a sentir rápidamente la necesidad de ganar para que su contrincante no escape.
Redacción de Cubanos por el Mundo