La reciente fiesta de cumpleaños de Leonardo DiCaprio, celebrada en West Hollywood por su 50 aniversario, generó una ola de quejas entre los vecinos de la zona.
La molestia principal de los residentes fue el ruido y el tráfico provocado por el gran flujo de invitados, quienes abarrotaron las calles y se congregaron en el área de valet parking, dificultando el tránsito y la tranquilidad de la comunidad.
Los vecinos, visiblemente irritados, expresaron su descontento ante el caos que alteró la noche, quejándose de la perturbación generada por la celebración.
Según reportes de la prensa local, el evento atrajo a una notable cantidad de celebridades, incluyendo a figuras del calibre de Katy Perry y Orlando Bloom, Robin Thicke con su pareja April Love Geary, y el presentador Bill Maher, entre otros.
Brad Pitt, otro de los grandes de Hollywood, también asistió junto a su novia, Inés de Ramón, arribando en su Porsche, lo que llamó la atención de los asistentes.
La gran cantidad de invitados no hizo más que acentuar el ruido y el tráfico, elementos que fueron motivo de desagrado para quienes residen en la localidad.
Por su parte, Leonardo DiCaprio, quien se mostró de excelente ánimo durante toda la noche, disfrutó de la compañía de sus amigos y colegas de la industria, dando poca importancia a sus vecinos.
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Según declaraciones de una fuente cercana, el actor pasó el tiempo conversando y compartiendo con sus invitados, quienes abarcaron múltiples sectores de la fiesta.
Además de Pitt, otros asistentes destacados incluyeron a Odell Beckham Jr., Tyga, Paris Hilton, Cara Delevingne, y Chris Rock, quienes también se unieron a la celebración.
La fiesta fue organizada en grupos distribuidos en diferentes áreas para acomodar a los numerosos invitados, lo que, a pesar de la logística, no evitó el impacto negativo en la comunidad circundante.
Redacción de Cubanos por el Mundo
