En Miami, el cubano Roiniel Pérez, de 31 años, fue arrestado bajo múltiples cargos, incluyendo asesinato en segundo grado, tras ser vinculado con el hallazgo del cuerpo calcinado de Oscar René Hernández Augustín, un hombre de origen guatemalteco reportado como desaparecido.
El cuerpo de Augustín, de 52 años, fue descubierto el jueves en una zona rural del suroeste de Miami-Dade, en la cuadra 23600 de SW y la 227th Avenue.
Según el informe policial, el cadáver presentaba signos de quemaduras de la cintura hacia abajo y estaba en estado de descomposición moderada.
Una autopsia determinó que la víctima fue apuñalada en varias ocasiones antes de su muerte.
La investigación tomó un giro el domingo, cuando agentes del Distrito Sur de la Policía de Miami-Dade intentaron detener al cubano, quien conducía el Toyota Corolla blanco de 2015 de la víctima.
Pérez evadió a las autoridades, iniciando una breve persecución que culminó en un accidente tras pasarse un semáforo en rojo.
El sospechoso intentó escapar a pie, escondiéndose bajo un vehículo estacionado antes de ser capturado por los oficiales.
Según el informe del arresto, el cubano confesó que Augustín lo recogió de su residencia la madrugada del martes, poco antes de ser reportado como desaparecido.
Además, admitió haber utilizado la tarjeta bancaria de la víctima en varias ocasiones, la cual fue encontrada en su poder junto con la identificación de Augustín.
Las pruebas halladas en el vehículo de la víctima incluyeron una “cantidad sustancial de sangre” en los asientos traseros, guantes de látex y fotografías en el celular del acusado que mostraban evidencia incriminatoria, como manchas de sangre en las tarjetas bancarias y cortes en la mano de Perez.
El cubano enfrenta cargos de asesinato, hurto mayor y otros delitos mientras continúa la investigación del caso.
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Redacción Cubanos por el Mundo
