La incertidumbre consume a la familia de Alejandro Peñafuerte, de 17 años, y William Tamayo Tuñon, de 41, dos cubanos que desaparecieron hace 15 días tras zarpar en las costas de la isla.
Aunque inicialmente aseguraron que iban a pescar, sus familiares sospechan que intentaban emigrar a Estados Unidos en una lancha rápida.
La posibilidad de un naufragio flota en el aire, pero hasta ahora no hay confirmación oficial, dejando a sus seres queridos en un doloroso limbo.
Elizabeth Tuñon, La madre de Tamayo Tuñon, devastada, pero aferrada a la esperanza, describió en conversación con Martí Noticias el momento como un “calvario”.
La desesperación de la familia es palpable, especialmente al considerar que Tamayo tiene a dos hijos, de 15 y 5 años, quienes están pasando un momento realmente amargo con todo esto que sucede.
En un intento por obtener respuestas, han solicitado ayuda a la Guardia Costera de Estados Unidos, pero los avances en la investigación son prácticamente inexistentes.
Mientras tanto, las autoridades cubanas no han encontrado rastros de los desaparecidos, y la Patrulla Fronteriza de Estados Unidos afirma no tener información.
Asimismo, los rumores sobre un posible accidente con sobrevivientes aumentan las especulaciones, aunque una embarcación localizada en Bahamas no coincidió con la utilizada por este par de cubanos.
En un principio, el nombre de estas dos personas salió a la luz como posibles fallecidos, pero la familia aún no puede confirmarlo.
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La situación de Tamayo Tuñon, de quien trascendió ya había intentado huir de Cuba cuatro veces, refleja la desesperación de muchos cubanos por escapar de las dificultades propiciadas por la dictadura castrista.
Mientras los días pasan, la falta de información solo intensifica la angustia. Para la familia de Tamayo y Peñafuerte, cada rumor, cada nueva pista, parece un rayo de esperanza que se apaga rápidamente.
“Siempre hay esperanza. La esperanza es lo último que se pierde por más duro que sea esto. Mi hijo tenía escrito en un tatuaje los nombres de sus niños y varios tatuajes en una pierna. Solo queremos saber qué fue lo que pasó. Estoy devastada”, dijo Elizabeth.
Se espera que, próximamente, los seres queridos de estos dos individuos reciban nuevas noticias al respecto.
Redacción de Cubanos por el Mundo
