En una muestra más de la creciente ola de inseguridad que azota a Cuba, un acto de indignante crueldad sacudió a la comunidad de La Habana.
Samuelito, un niño que depende de un coche especial adaptado a sus necesidades, sufrió el robo de ese artefacto en horas recientes.
El coche, que lleva marcado su nombre, fue sustraído por desconocidos, dejando a su familia en estado de desesperación.
La denuncia fue realizada por Yankiel Fernández, quien utilizó su cuenta de Facebook para compartir el doloroso suceso y pedir ayuda.
“Buenos días a esta bella y hermosa comunidad, paso por acá a comentarles que a Samuelito le han robado su coche especial, ¿hasta dónde vamos a llegar?”, escribió Fernández, haciendo un llamado urgente a la solidaridad de los ciudadanos.
Este hecho no solo refleja el nivel de criminalidad al que se ha llegado en La Habana, sino también cómo los más vulnerables, como los niños con discapacidad, también son azotados por una delincuencia desbordada.
En los comentarios de la publicación, muchos cubanos expresaron su indignación ante lo ocurrido, señalando que este tipo de delitos no solo afecta a las familias, sino a toda la sociedad.
“¿Hasta cuándo tendremos que aguantar tanta delincuencia? Y así la Fiscalía desmiente que en Cuba no ha crecido el delito, ¿hasta cuándo tendremos que esperar para acabar con tantos robos y violencia?”, escribió uno de los usuarios.
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Dichas palabras reflejan que la población está cada vez más cansada de la inseguridad que se vive en las calles y de una policía que, en lugar de proteger a los ciudadanos, se dedica a reprimir a los inocentes.
“No se imaginan el valor de ese coche y cuánto lo necesita un niño como él. Cuando eso solo lo usan niños con discapacidad, y no saben el trabajo que da encontrar algo funcional para ellos… Yo lo sé, porque tengo un niño con su misma condición”, expresó otra internauta.
Mientras tanto, la situación en Cuba sigue siendo crítica. La inseguridad crece día tras día, y los cubanos, desesperados, claman por soluciones que, hasta ahora, ni siquiera se asoman.
Redacción de Cubanos por el Mundo
