El círculo infantil XX Aniversario, ubicado en Santiago de Cuba, refleja de manera contundente la crisis estructural que afecta al sector educativo en la isla, donde los que pagan, tristemente, son los menos culpables de todo.
En este lugar, los cartones han sustituido a las puertas, mientras las paredes, completamente arruinadas, y la ausencia de ventanas, convierten el edificio en un espacio insalubre e inseguro para los niños.
Imágenes compartidas por el reportero Yosmany Mayeta, a través de las redes sociales, evidencian las condiciones deplorables del lugar.
Las imágenes muestran a los pequeños jugando en un ambiente sombrío que dista mucho de ser apropiado para el aprendizaje y desarrollo infantil. Además, la falta de mobiliario y la estructura comprometida del inmueble resaltan la gravedad del problema.
Esta situación, que ya venía agravándose en los últimos años, expone la negligencia del régimen en garantizar instalaciones educativas dignas.
Según cifras oficiales de 2020, de los 1,122 círculos infantiles existentes en ese momento, 37 permanecían cerrados por problemas constructivos, siendo La Habana la provincia más afectada.
Sin embargo, el deterioro ha continuado, y miles de madres enfrentan largas listas de espera para conseguir un cupo para sus hijos.
Mientras tanto, la falta de mantenimiento en las escuelas y círculos infantiles ha generado un entorno que pone en riesgo la seguridad y el bienestar de los niños.
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Esta realidad, que se presenta tanto en Santiago de Cuba como el resto del país, contrasta de manera alarmante con el despilfarro de dinero por parte de la dictadura, quien ya no solo se atreve a gastar en atraer turistas, sino que también se exponen realizando fiestas o viajes de lujo.
La incapacidad del régimen para atender problemas esenciales como la educación infantil no solo compromete el futuro de las nuevas generaciones, sino que también refleja el abandono en todo los aspectos de la vida del cubano.
Redacción de Cubanos por el Mundo