El régimen cubano anunció que a partir del 30 de junio de este año, se eliminará la tarjeta de turista para visitantes internacionales, y en su lugar, solo se aceptará la visa electrónica.
Esta medida, anunciada por Giana Galindo Enríquez, directora comercial del Ministerio de Turismo (MINTUR), se implementará con la intención de modernizar y agilizar el proceso de ingreso al país, según el discurso castrista.
Desde julio de 2024, ambas formas de visado han coexistido, pero a partir de la fecha indicada, la visa electrónica será la única forma aceptada para entrar a Cuba. Galindo Enríquez explicó que este cambio facilitará a los turistas completar el formulario de viajeros online desde la comodidad de su hogar, a través del sitio oficial.
El sistema de visado electrónico, conocido como Evisa, fue implementado el año pasado para eliminar la necesidad de documentos físicos adicionales, como la tarjeta de turista.
Además, la funcionaria informó que, respondiendo a las peticiones de muchos turistas, las líneas de telefonía móvil temporal de CubaCel Tur estarán disponibles por siete días en lugar de los 30 días previamente habilitados.
A pesar de los intentos de los comunistas de Cuba por “flexibilizar” medidas y fomentar el turismo, las cifras del sector aún no alcanzan los niveles previos a la pandemia porque la isla no es un lugar seguro para los visitantes.
Según Galindo, la isla sigue siendo un destino preferido en la región caribeña, pero los datos muestran una caída del 7.9% en el número de viajeros internacionales entre enero y noviembre de 2024 en comparación con el mismo período del año anterior.
Mientras destinos turísticos como Punta Cana en República Dominicana y Cancún-Tulum en México experimentan cifras récord de visitantes, los destinos cubanos han sufrido un declive significativo.
Esto se debe a la crisis que afecta al país, incluyendo el deterioro del sector hotelero, el déficit energético, la falta de alimentos, el declive del sector sanitario y otras decadencias que hay en el país.
A pesar de estas dificultades, la propaganda oficial exalta la abundancia y el confort de los hoteles cubanos, invitando a los turistas a vivir “experiencias únicas”, aunque lo único que hacen es mentir.
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Redacción Cubanos por el Mundo
