En MasterChef Junior (11), Marcelo, un talentoso niño cubano de apenas 9 años, se robó el corazón del público con su carisma, su pasión por la cocina y su orgullo por sus raíces caribeñas.
Originario de La Habana, Marcelo, o “Marce”, como lo llaman cariñosamente, ha demostrado que la edad no es un límite para destacar en los fogones.
Desde su presentación en el concurso, Marcelo dejó claro que su identidad cubana es una parte fundamental de su vida. “Soy felizmente cubano”, afirmó con una sonrisa que reflejaba su confianza y amor por su país.
Hace dos años, Marcelo y su familia se mudaron a Valencia, España, escapando de la crisis en Cuba, en ese país, el pequeño chef continúa perfeccionando sus habilidades culinarias, siempre con un pie en su tierra natal.
En una entrevista con la prensa independiente, Marcelo compartió que el sabor cubano corre por sus venas.
“Tengo el verdadero sabor cubano en la sangre”, dijo, destacando que su pasión por la cocina viene de su familia. Su tío es un experto cocinero, su abuela una talentosa repostera, y su padre ha trabajado en el mundo de la gastronomía, especialmente en cocina y barra.
Además, su abuelo paterno es un reconocido chef. Por otro lado, su lado artístico lo heredó de su abuelo materno, José Amador López Santander, conocido como Pepe López, un famoso músico cubano.
Marcelo creció entre fogones y escenarios, ya que su familia es dueña de dos restaurantes en Cuba: uno en La Habana y otro en Trinidad. “Siempre estaba entre la cocina, la barra o el escenario. Si no me dejaban entrar a la cocina, lloraba; si no me dejaban estar en la barra, lloraba; y si no subía al escenario, lloraba también. ¡Me encantaba todo eso!”, recordó entre risas.
Entre sus platos favoritos están el arroz congrí, la vaca frita, el cochinillo asado y, sobre todo, la ropa vieja, un plato que le inspira por sus infinitas posibilidades. “La ropa vieja la puedo poner sobre una base de plátano y hacer un delicioso tostoncito. ¡Todo un manjar!”, explicó con entusiasmo.
Aunque Marcelo está construyendo una vida en España, su corazón sigue en Cuba. “No es que no vaya a volver nunca más. De hecho, quiero ir cada verano y en cada vacación para ver los negocios familiares, estar con mi familia y contarles mis avances en MasterChef Junior”, aseguró.
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Redacción Cubanos por el Mundo
