Otro alarmante acto de violencia volvió a sacudir a la isla, cuando una auxiliar de limpieza fue asaltada a mano armada en el poblado El Cobre, ubicado en Santiago de Cuba, durante la madrugada de este lunes.
Según informó Yosmany Mayeta Labrada en sus redes sociales, la víctima, identificada como Bárbara, es una residente local conocida por su modestia y limitados recursos económicos.
De acuerdo con testimonios de vecinos al citado periodista, Bárbara trabaja en la escuela primaria Aurelio Fernández Hernández y, al momento del ataque, se dirigía a una panadería para hacer fila.
El asalto ocurrió en un tramo oscuro cerca de la subida al Santuario Nacional de la Virgen de la Caridad del Cobre, un punto crítico por su falta de iluminación y seguridad.
El agresor, además de despojarla de sus pertenencias, hirió sus manos, lo que generó indignación entre los habitantes de la comunidad.
Aunque la guardia operativa visitó a la víctima tras conocerse el caso, los residentes de esa zona de Santiago de Cuba expresaron su descontento, asegurando que la intervención fue insuficiente y que las autoridades locales no han tomado medidas concretas para garantizar la seguridad en la zona.
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El caso de Bárbara refleja la creciente inseguridad que afecta a Santiago de Cuba y pone de relieve las carencias estructurales que enfrentan los habitantes, quienes esperan (pero nunca reciben) respuestas concretas para vivir en un entorno más seguro.
Mientras los antisociales hacen y deshacen a lo largo y ancho de la mayor de las Antillas, miles de inocentes permanecen en las cárceles del país sin haber cometido un solo delito; peor aún, están encerrados, precisamente, por alzar su voz contra la interminable pesadilla con la que tienen que lidiar todos los días.
Redacción de Cubanos por el Mundo
