En la provincia de Granma, varios individuos fueron arrestados por estar presuntamente involucrados en el robo y tráfico ilícito de combustible de aviación.
Según reportó el aparato de propaganda del régimen en redes sociales, los malhechores sustrajeron más de 3,000 litros de gasolina Turbo desde el Aeropuerto Internacional Sierra Maestra, en Manzanillo, y comenzaron a distribuirlo de manera clandestina en la región de Yara.
El combustible fue transportado en condiciones precarias, utilizando una carreta equipada con una pipa para su traslado.
“La policía detuvo a malhechores que transportaban desde Manzanillo el combustible de aviación que habían logrado sustraer del aeropuerto Internacional Sierra Maestra. Cuentan que se habían robado más de 3 mil litros de gasolina Turbo y lo estaban comercializando ilegalmente a la población de Yara”, se lee en la publicación.
Asimismo, los hoy detenidos (supuestamente), que intentaron comercializar el combustible a la población, ahora enfrentan cargos graves por el delito de contrabando.
Este caso, como muchos otros, ha generado controversia, ya que, como suele ocurrir en situaciones similares, las autoridades castristas intentan presentar estos hechos como parte de una estrategia contra la delincuencia.
Sin embargo, muchos ciudadanos se preguntan por qué los delitos relacionados con el tráfico de combustibles y otros recursos siguen siendo comunes en Cuba, a pesar de los supuestos “esfuerzos” del régimen para controlar la situación.
De hecho, es pertinente recordar que este de Granma no es el único caso relacionado con robo de combustible que se suscita en la isla en los últimos días. Hace poco, se supo que la policía de Marianao, en La Habana, realizó la captura de tres individuos acusados de robar combustible de un generador ubicado en el barrio Traviesa, dentro del área de la CUJAE.
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Los delincuentes, quienes trabajaban en el mismo emplazamiento donde cometían el robo, fueron sorprendidos in fraganti.
Redacción de Cubanos por el Mundo
