Tras el inicio de la invasión rusa a Ucrania en 2022, la alianza entre Cuba y Rusia parece haber tomado un giro oscuro y es por la incorporación de mercenarios cubanos.
Una investigación realizada por el proyecto “Esquemas” de Radio Liberty reveló que cubanos están siendo reclutados, en algunos casos mediante engaños o coerción, para combatir en el conflicto.
Algunos se unen por necesidad económica, mientras que otros lo hacen por convicciones ideológicas. Los periodistas analizaron documentos de las Fuerzas Armadas de Ucrania y revisaron las redes sociales de mercenarios cubanos, lo que permitió identificar a varios de ellos, determinar dónde se entrenaron y en qué unidades rusas sirvieron.
Uno de estos casos es el de Frank Darío Jarossey Manfuga, un cubano de 36 años capturado por el ejército ucraniano en marzo de 2024. Jarossey, quien se unió al ejército ruso en enero de ese año, relató cómo fue engañado para participar en la guerra.
“Nunca tuve intención de matar a nadie. Nunca quise participar en la guerra. Tengo una familia”, afirmó emocionado durante una entrevista con Radio Liberty.
Antes de su reclutamiento, Jarossey trabajaba como profesor de geografía en Guantánamo, pero debido a la precaria situación económica en Cuba, se vio obligado a dedicarse a la música. Según su testimonio, le prometieron trabajo en obras de construcción en Rusia, pero terminó siendo enviado al frente de batalla en Ucrania, a casi 10,000 kilómetros de su hogar “Fui engañado”.
Durante la entrevista, Jarossey admitió que, antes de llegar a Rusia, tenía un conocimiento limitado sobre el conflicto entre Ucrania y Rusia. “En Cuba no lo enfatizaban, no hablaban de resultados ni de estadísticas en la televisión”, explicó. Ahora, desde su perspectiva como prisionero de guerra, asegura comprender mejor las razones detrás del conflicto y aboga por su fin: “Creo que la guerra debería terminar porque mucha gente está muriendo”.
La investigación también destaca el papel histórico de Cuba como aliado clave de Rusia. Durante la Guerra Fría, Fidel Castro buscó una alianza estratégica con la Unión Soviética, creyendo que Moscú defendería a la isla en caso de un ataque estadounidense.
Esta relación se ha mantenido en las décadas posteriores, aunque ahora parece estar vinculada a intereses más oscuros, como el reclutamiento de mercenarios.
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Redacción Cubanos por el Mundo
