Un trágico incidente conmocionó a la ciudad de Bayamo, en Granma, el pasado 14 de febrero, cuando Antonio Díaz Méndez, un guaguero de la localidad, perdió la vida tras ser atacado brutalmente en una parada de transporte público.
Según reportes en redes sociales, el hombre, que se encontraba en su camino al trabajo, sufrió múltiples puñaladas a manos de un agresor desconocido, quien, aparentemente, intentó robarle sus pertenencias.
A pesar de la desesperada lucha por defenderse con una alcancía, las heridas infligidas fueron fatales. El personal de seguridad de la zona acudió rápidamente en su auxilio y lo trasladaron al hospital local, pero, al llegar, se encontraron con la triste realidad de la falta de recursos médicos esenciales.
Los familiares de Antonio intentaron conseguir medicamentos fuera del hospital, pero, lamentablemente, no pudieron evitar su fallecimiento.
La identidad del agresor o agresores sigue siendo desconocida, lo que aumenta el sentimiento de inseguridad entre los ciudadanos.
Asimismo, la ineficacia de las autoridades ante este tipo de hechos solo incrementa el temor y la impotencia que se vive en las calles.
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La familia de Antonio, devastada por la pérdida, lamenta profundamente lo ocurrido y pide justicia, aunque la incertidumbre sobre el esclarecimiento de los hechos sigue siendo un tema sin respuesta.
“Este hombre se debatió entre la vida y la muerte; le ganó la muerte. Es mi primo, Antonio Díaz Méndez, y acaba de morir producto a tres heridas causadas por personas asesinas que lo atacaron para robarles sus prendas”, fueron las palabras de Jorge Díaz Domínguez en Facebook.
Tristemente, tanto Granma como el resto de la isla sigue siendo azotada brutalmente por la delincuencia.
La “mejor policía del mundo”, en lugar de hacerle frente, prefiere hacer de la vista gorda y dedicarse únicamente a reprimir inocentes.
Redacción de Cubanos por el Mundo
