El régimen castrista, en medio de su desesperado intento por seguir reprimiendo, lanzó una nueva amenaza, esta vez, a quienes se acerquen a José Daniel Ferrer, el destacado líder opositor cubano.
Los sicarios al servicio de la dictadura advirtieron que podrían enfrentar hasta una década tras las rejas quienes visiten al activista, según dijo él mismo a Martí Noticias.
Esta medida busca frenar cualquier contacto con el fundador de la Unión Patriótica de Cuba (UNPACU), cuya labor se centra en apoyar a comunidades marginadas.
Las intimidaciones escalaron el pasado domingo, cuando las autoridades detuvieron a varias personas en Santiago de Cuba. Entre los afectados estuvieron un familiar de la esposa de Ferrer y un residente cercano, ambos ajenos a actividades políticas.
Los agentes los trasladaron a una estación local y los amenazaron con penas de entre cinco y diez años de prisión.
Asimismo, dos vecinos más recibieron advertencias similares de la policía política, que les prohibió visitar la sede de la UNPACU bajo riesgo de arresto.
Incluso, a primeras horas del lunes, un grupo que llevaba leña para asistir a casos sociales atendidos por José Daniel Ferrer fue interceptado a pocas calles de su destino.
“Otros dos vecinos fueron retenidos por la policía política y les amenazaron con que si seguían viniendo a nuestra sede, iban a ser también encarcelados. Hoy, temprano en la mañana, varios casos sociales que atendemos acá trajeron una carretilla de leña y a dos cuadras los detuvieron”, contó.
Es importante recordar que Ferrer fue excarcelado el pasado mes de enero, luego del acuerdo que el régimen alcanzó con la administración de Biden de excluirlo de la lista de países patrocinadores de terrorismo, medida que luego fue revocada por Donald Trump.
A pesar de ser torturado brutalmente en prisión por casi cuatro años, Ferrer salió de la cárcel con los mismos ideales y con esas ganas de seguir luchando por el bien y la libertad.
Redacción de Cubanos por el Mundo