En un estacionamiento frente al Ayuntamiento de Stuart, Florida, ocurrió un violento incidente el pasado 31 de enero que dejó a una pareja de ancianos con heridas graves.
Mark Swick, el responsable del ataque, fue arrestado semanas después por la policía local tras una investigación que logró identificarlo.
La prensa señaló que el hombre enfrenta ahora dos cargos graves por agresión contra personas mayores de 65 años.
Todo comenzó cuando la pareja, un hombre y una mujer cercanos a los 70 años, buscaba un lugar para estacionarse esa noche.
Tras dar varias vueltas sin éxito, notaron a un individuo que subía a una camioneta. Con la esperanza de que el sitio quedara libre, decidieron esperar. Sin embargo, tras varios minutos sin movimiento, la mujer optó por acercarse al conductor para consultarle si planeaba marcharse.
El sujeto, no obstante, respondió con furia. Abrió la puerta de su vehículo, bajó de un salto y, sin mediar palabra, atacó a la mujer. La golpeó en el rostro, la arrojó al pavimento y comenzó a darle patadas en el abdomen y las costillas.
El esposo, al ver la escena, intentó intervenir. Corrió hacia el agresor y logró derribarlo momentáneamente, pero Swick, más joven y fuerte, lo dominó rápidamente y lo dejó también en el suelo.
La violencia no cesó ahí. Cada vez que la mujer intentaba alejarse, el atacante regresaba para seguir golpeándola. Finalmente, el hombre se retiró del lugar, dejando a la pareja malherida y abandonada en el estacionamiento.
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Las secuelas fueron devastadoras: el rostro del hombre quedó irreconocible por la hinchazón, con los ojos completamente cerrados, mientras que la mujer descubrió días después que tenía tres costillas fracturadas.
A pesar del tiempo que tomó ubicarlo, la policía de esa zona de Florida consiguió detener a Swick tras tres semanas de indagaciones. La pareja, que prefirió mantener su identidad en reserva, expresó su deseo de que el responsable reciba una condena significativa.
Las autoridades aún investigan qué pudo haber motivado un estallido tan desproporcionado, pero por ahora, el caso sigue su curso en el sistema judicial.
Redacción de Cubanos por el Mundo
