En La Habana, las autoridades sancionaron a una mujer con dos multas económicas por haber acabado con la vida de un gato en la zona de Casablanca.
El hecho, que ocurrió hace pocos días, quedó en el centro de la atención tras la intervención de la plataforma Protección Animal SOS – PASOS, un grupo dedicado a velar por el bienestar de los animales en Cuba.
Aunque las multas ascendieron a un total de 10,000 pesos cubanos, los defensores de los animales manifestaron su descontento y pidieron medidas más drásticas para este tipo de actos.
La mujer, identificada como Ana Selena Martínez López, recibió una sanción de 3,000 CUP impuesta por Sanidad Animal y otra de 7,000 CUP aplicada por la Policía Nacional Revolucionaria (PNR). Esta última se justificó porque el gato tenía propietario, lo que llevó a clasificar el incidente también como un robo.
Según se supo, ella golpeó al animal contra el suelo en varias ocasiones, un acto que defendió al asegurar que lo usaría para preparar comida. Sin embargo, los activistas desestimaron cualquier excusa relacionada con necesidades alimenticias y resaltaron la brutalidad del suceso.
Miembros de PASOS, entre ellos las protectoras Yucimi, Enma, Laura, Ammy, Paloma y la coordinadora Raquel, pasaron varias horas en la estación policial de Regla para seguir de cerca las acciones legales.
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Desde temprano en la mañana hasta la tarde, estas personas insistieron en conocer el desenlace del caso y abogaron por una respuesta más contundente. En su opinión, las multas no reflejaron la gravedad de la crueldad ejercida contra el felino, un acto que captaron en video y que circuló ampliamente.
“Quien es capaz de torturar y acabar con la vida de un ser indefenso demuestra una total ausencia de empatía y escrúpulos, lo que representa un riesgo no solo para los animales, sino también para la sociedad en general”, manifestó la organización en un comunicado.
En las plataformas digitales, la noticia desató una ola de críticas, tanto de personas en La Habana como del resto de la isla. Muchos usuarios coincidieron en que las multas fueron insuficientes y abogaron por penas de prisión para quienes maltratan animales.
Lamentablemente, el maltrato animal en Cuba cada vez es más común y los defensores luchan porque esto, a través de las leyes y sanciones severas, se termine lo antes posible.
Redacción de Cubanos por el Mundo
