El reconocido presentador e influencer cubano, Alex Otaola, puso el foco en las profundas desigualdades que marcan la vida de un lado y otro en la isla.
Desde su popular programa Hola! Ota-Ola, denunció cómo, mientras la élite disfruta de privilegios inalcanzables, el cubano común enfrenta un destino de penurias y olvido.
Según sus palabras, la realidad del pueblo contrasta brutalmente con lo que, con descaro y sin vergüenza, exhibe la cúpula comunista, una diferencia que, tanto para él como para muchos, resulta intolerable.
Otaola puso un ejemplo desgarrador: un anciano llegó a un hospital en busca de atención, pero la falta de electricidad impidió que los médicos realizaran las pruebas necesarias. El hombre falleció sin recibir ayuda.
Más tarde, cuando trasladaron su cuerpo a la funeraria, la oscuridad persistió, pues tampoco había luz para despedirlo.
“Mira el viejito en el hospital, en el mismo país donde el Capitolio está encendido, donde todo se ve lindo, donde todo es una bendición. Así no va a terminar Raúl Castro, y tiene seguro la misma edad del viejito. Este no está en estas condiciones, ni Mariela Castro, nadie, ni Ramiro Valdés”, dijo el presentador.
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Este episodio, afirmó Otaola, simboliza el abandono en el que vive sumida la población, atrapada en un ciclo de carencias que el régimen de Cuba ignora con toda la intención.
Asimismo, cuestionó a quienes aceptaron esta situación como algo cotidiano, urgiendo a la audiencia. Y es que la oscuridad no solo envolvió a este fallecido, sino que sigue cubriendo a todo un país.
En reiteradas ocasiones, Alex Otaola ha instado al cubano de a pie a luchar con valentía por su libertad, ya que es el mismo pueblo el que tiene la capacidad de acabar de una vez por todas con la tiranía.
Redacción de Cubanos por el Mundo