En Miramar, Florida, el destino puso a prueba la habilidad de un piloto cuando su avioneta enfrentó una crisis inesperada.
Este miércoles, poco después de la 1:00 p. m., un Piper PA-28, con dos ocupantes a bordo, descendió de manera imprevista hacia un terreno despejado junto a la escuela primaria Coconut Palm, ubicada en 13601 Monarch Lakes Boulevard.
El incidente comenzó minutos antes, cuando el piloto, tras despegar del aeropuerto North Perry, detectó un fallo crítico en el motor. Sin posibilidad de regresar a la pista, tomó una decisión rápida. “Tenemos un fallo de motor. Vamos a aterrizar por aquí”, comunicó a la torre de control.
Ante la imposibilidad de alcanzar un aeropuerto, optó por un campo cercano al recinto escolar.
Con precisión milimétrica, el avión rozó una cerca y maniobró entre dos estructuras portátiles, evitando cualquier colisión. El aterrizaje ocurrió sin causar heridos ni daños significativos a la escuela, que permaneció intacta y operativa.
Minutos antes, el patio estuvo lleno de niños disfrutando de actividades al aire libre, pero, por fortuna, todos entraron al edificio justo a tiempo. “Es un milagro, un milagro. Hizo un aterrizaje perfecto. Si hubiera ido más lejos y los niños estuvieran jugando, habría sido una catástrofe. El tipo que pilotó ese avión merece una medalla”, expresó Santiago, un vecino que presenció la escena.
La comunidad de esa zona de Florida respiró aliviada tras el suceso. Miriam Zeno, otra residente, comentó: “¡Guau, qué suerte tuvieron! Y la escuela, los niños… ¡Uf! Sé que los padres probablemente estaban muy preocupados”.
El tráfico en la zona fluyó con normalidad, y las clases continuaron sin interrupciones, aunque el asombro perduró entre padres y maestros.
Entretanto, la policía de Miramar acordonó el área durante el resto del día, mientras detectives recopilaron evidencias.
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La Administración Federal de Aviación (FAA) asumió la investigación y emitió un comunicado: “Un Piper PA-28 se estrelló en un campo poco después de despegar del Aeropuerto North Perry en Hollywood, Florida, alrededor de la 1:05 p. m., hora local, del miércoles 12 de marzo. Había dos personas a bordo. La FAA investigará el incidente”.
La Junta Nacional de Seguridad en el Transporte también analizará las causas del desperfecto. Curiosamente, este avión, registrado a nombre de una compañía de Delaware, ya protagonizó un aterrizaje forzoso en 2022 en el mismo aeropuerto, sin víctimas que lamentar.
El jefe de policía, Delrish Moss, destacó la pericia del piloto: “Buscó un lugar seguro y logró posarse sin complicaciones cerca del área escolar”.
El jueves, está previsto que remolquen el avión para despejar el terreno. Mientras tanto, en Miramar celebran que una situación de riesgo terminó como un relato de valentía y buena fortuna.
Redacción de Cubanos por el Mundo
