Daniela Patricia Ferrer Reyes, hija del líder opositor José Daniel Ferrer, enfrenta un futuro incierto en Estados Unidos debido a su situación migratoria.
Su madre, Liettys Rachel Reyes, una conocida activista de la Unión Patriótica de Cuba (UNPACU), lanzó un pedido urgente a través de un video en redes sociales, solicitando ayuda a figuras clave como congresistas, abogados y medios de comunicación para resolver el caso de su hija.
Daniela llegó a territorio estadounidense en 2022 junto a su tía, Lianay Reyes Tur, quien estaba embarazada de 35 semanas en ese momento. La menor salió de Cuba en un contexto crítico: su padre estaba encarcelado, y su madre ya se encontraba en el exilio.
La travesía, que incluyó cruzar varias fronteras, buscaba ofrecerle seguridad frente a la persecución que sufría su familia en la isla.
Actualmente, la niña permanece bajo el estatus I-220A. Este permiso temporal la mantiene en un estado de incertidumbre, ya que no equivale a una entrada legal ni le permite acceder a los beneficios de la Ley de Ajuste Cubano, que otorga residencia permanente tras un año y un día en el país.
“Mi hija solo tiene siete años de edad, no puede defenderse en un caso de asilo en una corte de los Estados Unidos”, afirmó Reyes, subrayando la vulnerabilidad de Daniela en este proceso.
En su mensaje, la activista también expresó indignación por la presencia de personas vinculadas al régimen cubano que, según ella, residen en Estados Unidos con beneficios migratorios. “Hoy muchos agentes de la Seguridad del Estado, chivatos al servicio de la dictadura cubana se mantienen dentro de Estados Unidos con una green card”, denunció, contrastando esa realidad con la lucha de su hija por permanecer en el país.
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José Daniel Ferrer, desde su perspectiva, respaldó el llamado al compartir el video. “Mi amada hija Daniela Patricia Ferrer Reyes no tenía otra opción que salir con su tía a reencontrarse con su madre, mi expareja, hermana de lucha y amiga Liettys Rachel Reyes”, dijo, recordando las circunstancias extremas que forzaron la salida de la menor.
Reyes insiste en que Daniela cuenta con pruebas suficientes para quedarse en Estados Unidos y evitar ser deportada a Cuba o cualquier otro lugar.
Tanto su padre como la activista confía en que la comunidad internacional y las autoridades responderán a su clamor para garantizar un futuro seguro a su hija.
Redacción de Cubanos por el Mundo