Este domingo, la comunidad cubana en el exilio se congregó en la funeraria Caballero Rivero de Hialeah para dar el último adiós a Geobel Damir Ortiz, el niño de siete años que falleció tras una larga lucha contra una grave enfermedad y la falta de atención médica adecuada en Cuba.
El velatorio, rodeado de coronas de flores blancas, fue un espacio de dolor y solidaridad, donde la madre de Damir, Eliannis Ramírez, recibió el apoyo de decenas de personas, incluyendo activistas y exprisioneros políticos. A petición de la familia, el acceso al recinto fue restringido para preservar la intimidad del momento.
Entre los asistentes estuvieron la exprisionera política Angélica Garrido y la activista Diasniurka Salcedo, quienes, al igual que Ramírez, evitaron hacer declaraciones a la prensa. La madre del menor llegó al lugar visiblemente afectada, solicitando que no se tomaran fotografías ni videos durante el homenaje.
El caso de Damir conmovió a la diáspora cubana y demostró las fallas del sistema de salud en la isla que en reiteradas oportunidades deja morir a los enfermos.
Damir fue diagnosticado con neurofibromatosis tipo 1 a los dos años, su condición se agravó tras contraer una infección bacteriana en Cuba, que derivó en sepsis y fallo multiorgánico. A pesar de los esfuerzos por trasladarlo a EE.UU. para recibir tratamiento especializado, su estado crítico al llegar no pudo ser revertido.
La antillana Amelia Calzadilla, una de las personas que apoyó a la familia, destacó la unidad de los cubanos en torno a la causa de Damir y criticó al régimen de la isla por intentar desacreditar los esfuerzos para salvarlo. “Este caso demostró que los cubanos somos capaces de unirnos y dejar en evidencia al régimen”, afirmó.
Los cubanos a través de las redes sociales dejaron muchos mensajes de condolencias para la familia del niño.
La activista Yamilka Lafita, conocida como “Lara Crofs”, anunció que su perfil permanecería en silencio en señal de duelo. “Este perfil está en luto, sin publicaciones, en solidaridad con Eliannis y todos los que hoy despiden a Damir”, escribió.
Por su parte, Diasniurka Salcedo Verdecia, una de las principales impulsoras del traslado del niño, reveló que Ramírez solicitó asilo político en EE.UU. por temor a represalias tras denunciar las carencias médicas en Cuba.
El velatorio se extendió hasta las 10:00 de la noche y las cenizas de Damir permanecerán en Miami, donde su madre espera reconstruir su vida lejos de la isla.
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Redacción Cubanos por el Mundo
