Un ómnibus de la ruta 37, identificado con el número 5248, quedó inoperable tras ser apedreado en la madrugada del martes en el reparto Santos Suárez, La Habana.
El ataque, ocurrido durante el recorrido de confronta, no dejó heridos, pero causó graves daños materiales, intensificando la crisis del transporte público en la capital, según reportó Transportación Habana TH en su página de Facebook.

El vehículo, clave para las rutas 37 y A-18, quedó fuera de servicio, afectando a cientos de pasajeros que dependen de él. El grupo destacó que estos incidentes “están causando un daño irreparable a nuestra comunidad”, señalando el impacto directo en la movilidad urbana.
Factores como el consumo de drogas y la presencia de personas en condiciones vulnerables fueron mencionados como causas subyacentes de estos actos.
Asimismo, Transportación Habana TH hizo un llamado urgente a la comunidad para detener esta ola de vandalismo. Los responsables, descritos como una minoría que actúa con impunidad, amenazan con colapsar un sistema ya debilitado. “Necesitamos poner un STOP a esta situación antes de que nos quedemos sin opciones de transporte”, expresaron.
No obstante, horas más tarde, confirmaron que esta última unidad afectada a volvió a la acción.

La Habana ha registrado casos similares en días recientes. El 19 de abril, un vehículo de la ruta P11 fue atacado durante su servicio de confronta, según la Empresa Provincial de Transporte de La Habana.
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Anteriormente, el ómnibus 5229 de la ruta 23 sufrió un apedreamiento cerca del parque de Fábrica, pero la la Policía Nacional Revolucionaria y vecinos permitió capturar a varios sospechosos.
Muchos de estos incidentes se generan por disputa dentro de las mismas unidades, ya sea involucrando pasajeros o hasta los mismos conductores, desembocando en un problema que, lamentablemente, no hace más que empeorar el ya precario transporte público de la capital de la mayor de las Antillas.
Redacción de Cubanos por el Mundo