El régimen cubano registró un alarmante retroceso en su programa de construcción de viviendas durante el primer trimestre del año, incumpliendo más del 87 % de la meta prevista.
Pese al reconocimiento oficial del fracaso, la dictadura no ha presentado un plan concreto para solucionar la crisis habitacional que afecta a miles de familias.
Según datos publicados por el periódico oficialista Granma, de las 10,795 viviendas planificadas para este período, solo se terminaron 1,344, lo que representa un 12,4 % del objetivo. La cifra refleja el colapso estructural del sector y la incapacidad del régimen para responder a una de las necesidades más urgentes de la población.
Las autoridades comunistas atribuyen el incumplimiento a la escasez de cemento y otros materiales de construcción, resultado de una industria paralizada, la falta de inversión y un modelo económico que prioriza otros sectores, como el turismo. En 2024, la producción de cemento apenas alcanzó el 10 % de la capacidad instalada, evidenciando el deterioro del sistema productivo nacional.
Fábricas clave, como la planta cementera de Cienfuegos, permanecen inactivas o en reparaciones sin fecha de culminación. La producción local de materiales es insuficiente para cubrir la demanda, agravando el déficit en un país donde miles de personas viven en condiciones precarias.
En provincias como Ciego de Ávila, al ritmo actual, resolver el déficit habitacional tomaría casi 40 años, según estimaciones. Pese a la gravedad de la situación, no se han anunciado cambios estructurales ni responsabilidades políticas. René Mesa Villafaña, ministro de la Construcción desde hace dos décadas y figura central de estos reiterados fracasos, sigue en el cargo.
Los discursos oficiales repiten promesas como “mayor eficiencia”, “innovación tecnológica” y “estrategias sostenibles”, pero sin resultados tangibles. Mientras tanto, aumenta el número de cubanos sin hogar o en viviendas en riesgo de derrumbe.
TE PUEDE INTERESAR: Con estricta vigilancia despidió el preso político, José Barrenechea, a su madre
Redacción Cubanos por el Mundo
