Tres adolescentes oriundos de Florida enfrentan graves acusaciones por secuestrar a un hombre en Las Vegas, amenazarlo con un arma y despojarlo de 4 millones de dólares en criptomonedas y activos digitales.
Belal Ashraf y Austin Fletcher, ambos de 16 años y originarios del condado de Pasco, junto con un tercer menor cuya identidad no se reveló, son señalados por delitos de secuestro, robo y extorsión.
La noche del crimen, ocurrido en noviembre de 2024, los jóvenes abordaron a la víctima en el estacionamiento de su residencia en Las Vegas, tras un evento relacionado con criptomonedas que él organizaba.
Con un arma en mano, lo obligaron a subir a su propio vehículo y lo trasladaron a White Hills, Arizona, a más de 112 kilómetros de distancia.
“Le dijeron a la víctima que si obedecía, viviría para ver otro día, y que si no obedecía, atraparían a su padre y lo matarían”, detallan los reportes policiales.
Posteriormente, cubrieron su cabeza con una toalla y lo amenazaron para que entregara las contraseñas de sus cuentas financieras.
Durante el trayecto, los adolescentes, presuntamente guiados por una cuarta persona a través de una llamada en altavoz, exigieron acceso a las criptomonedas y tokens no fungibles (NFT) de la víctima.
Tras el robo, abandonaron al hombre en el desierto, quien caminó ocho kilómetros hasta una gasolinera para pedir ayuda.
La policía rastreó un vehículo sospechoso que viajó desde Florida hasta Nevada, lo que llevó a la identificación de los acusados.
Además, un arma encontrada en Mississippi, vinculada a un familiar de uno de los menores, coincidía con la mostrada en redes sociales por uno de ellos.
Ashraf y Fletcher, procesados como adultos por decisión de un juez de menores, tienen antecedentes de conducta disruptiva. En un incidente escolar en Florida, ambos insultaron a autoridades en inglés y árabe, y Ashraf mostró actitud desafiante hacia un agente escolar.
El tercer sospechoso, según un fiscal, ya no está en Estados Unidos. En una audiencia reciente, el defensor de Fletcher solicitó arresto domiciliario, pero el juez Daniel Westmeyer estableció una fianza de 4 millones de dólares.
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Las autoridades continúan investigando cómo los adolescentes planearon el crimen y si hay más involucrados.
Los cargos presentados reflejan la gravedad de un caso que expone los riesgos del auge de las criptomonedas y la delincuencia juvenil organizada.
Redacción de Cubanos por el Mundo
