La activista cubana Yamilka Lafita, conocida como Lara Crofs, enfrenta una intensificación del acoso por parte de esbirros del régimen, tras recibir amenazas directas de un agente de la Seguridad del Estado y sufrir el vandalismo de su portero electrónico en La Habana.
Lafita, quien se dedica a apoyar a comunidades vulnerables en Cuba, expresó su temor ante la escalada de intimidaciones. “Por primera vez desde el 2018 he sentido miedo”, confesó, aunque dejó claro su compromiso: “Yo de Cuba no me voy y tampoco me voy a callar. El pueblo tiene derecho a la libertad”.
El jueves por la mañana, un hombre se presentó frente a su vivienda exigiendo que acudiera a una citación sin explicar los motivos. Al negarse, recibió una amenaza: “Si no vas, vas a saber cuáles son las consecuencias”, según relató.
La activista cubana, que estaba sola y con su portero electrónico destruido, se sintió vulnerable y rechazó salir, exigiendo un documento oficial que justificara la citación, el cual no le fue proporcionado.
Cabe subrayar que, días antes, Lafita fue insultada y amenazada por un desconocido cerca de un contenedor de basura. También notó seguimientos por parte de individuos en motos sin matrícula y movimientos sospechosos alrededor de su casa.
Estas acciones, según ella, buscan aislarla y generar un ambiente de inseguridad. “Quieren que nos vayamos”, denunció, subrayando que el daño a su portero, único afectado entre los ocho de su calle, la dejó sin capacidad para identificar a quienes llegan a su domicilio.
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En los últimos tiempos, esta activista cubana ha sido objetivo del régimen castrista por el simple hecho de servir a los más necesitados y denunciar las precariedades provocadas por ellos mismos en la isla comunista.
A pesar de la persecución y las amenazas, se ha mantenido firme en todo momento y su voluntad de ayudar a los más vulnerables no ha cesado.
Redacción de Cubanos por el Mundo
