La congresista de origen cubano, María Elvira Salazar, exhortó a la administración de Donald Trump a que no deporte a los más de 530 mil migrantes que fueron beneficiados con el programa de parole humanitario.
Las declaraciones de la legisladora republicana llegan después de que la Corte Suprema de Estados Unidos autorizó al gobierno de Trump a revocar el programa migratorio impulsado por la administración demócrata de Joe Biden.
En ese sentido, María Elvira Salazar envió una carta al presidente Trump en la que pide que sea utilizada la herramienta ejecutiva de Salida Forzosa Diferida (DED, por sus siglas en inglés) que otorgaría un alivio temporal de deportación a los migrantes de Cuba, Haití, Nicaragua y Venezuela que recibieron el parole humanitario. Esto mientras completan sus procesos de asilo, y otras solicitudes migratorias.
La congresista precisó que, estos migrantes entraron a los Estados Unidos legalmente “confiando en las promesas vacías de la administración Biden”, al tiempo que agregó que “no podemos ignorar el costo humano”.
“Insto a la administración a que utilice su autoridad ejecutiva y conceda la DED para evitar que sean enviados de regreso a la violencia y la represión”, apuntó María Elvira en su red social X.
Es importante mencionar que, en una ocasión anterior, la política republicana había hecho la misma solicitud al presidente Trump de los que los migrantes con parole humanitario no fuesen deportados, argumentando que este beneficio permitía una verificación correcta caso por caso, para de esa manera proteger la seguridad nacional y el compromiso moral de Estados Unidos con respecto a los ciudadanos que huyen de sus países por la represión, la violencia y la persecución política de los regímenes comunistas.
“Debemos proteger las promesas hechas a estas personas con compasión y responsabilidad (…) Cuba, Nicaragua y Venezuela viven bajo dictaduras comunistas; Haití está colapsado por la violencia de pandillas. Estos casos merecen un tratamiento especial”, consideró en su declaración.
Vale destacar que el DED es un mecanismo migratorio que no confiere estatus legal permanente, pero protege temporalmente de la deportación a ciudadanos de países designados por el presidente.
Entretanto, el programa de parole humanitario conocido como “CHNV” impulsado en 2022 por Biden permitió la entrada de más de medio millón de personas de los países mencionados por medio de patrocinadores que servían de sustento económico de los beneficiados.
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Redacción Cubanos por el Mundo