La salud del preso político cubano, Félix Navarro, continúa deteriorándose mientras se mantiene injustamente encarcelado en las mazmorras de la dictadura castrista.
Así lo denunció la activista cubana Rosa María Payá en sus redes sociales, en donde precisó que, el opositor logró hacer una llamada desde la prisión a sus familiares, en la que confirmó la grave situación que está viviendo desde la cárcel.
En ese sentido, según indicó Payá, Félix Navarro afirmó que “sentía que se estaba muriendo” en la prisión, y hasta el momento a su esposa, Sonia Álvarez Campillo, los esbirros del régimen no le permiten verlo ni comunicarse con él.
Rosa María apuntó que, una teniente coronel del castrismo, fue quien tuvo comunicación con Sonia, asegurándole que al preso político le “estaban brindando atención médica”, por lo que debía confiar en su palabra.
No obstante, ni los familiares de Félix Navarro ni los activistas cubanos dentro y fuera de la isla creen en la declaración de esta funcionaria castrista, por lo que se puede presumir que el preso político no esté siendo atendido, situación que debilita aún más su estado de salud.
“No confiamos, Félix Navarro llamo para decir que estaba muy mal de salud, para decir que sentía que se estaba muriendo, eso fue el lunes en la mañana, y desde entonces, en reiteradas ocasiones le niegan a su familia poder verlo y comprobar su estado de salud”, agregó Rosa María Payá, quien exigió la libertad de Navarro y todos los presos políticos dentro de la isla.
Rosa María Payá recordó que, la vida de Félix Navarro corre peligro, y responsabilizó a Díaz-Canel y a Raúl Castro de lo que pueda ocurrirle al preso político.
Redacción Cubanos por el Mundo