Una operación policial desplegada en el condado de Miami-Dade terminó con la detención de una cubana, acusada de llevarse sin permiso a su hijo menor durante un encuentro autorizado con vigilancia profesional en la Pequeña Habana.
El hecho movilizó a las autoridades por varias horas, hasta que finalmente lograron recuperar al niño en buen estado.
La sospechosa, identificada como Ismari Figueroa León, de 34 años, tenía permitido ver a su hijo Ryan Artiles Figueroa únicamente bajo condiciones de supervisión, tras perder la custodia legal meses atrás.
Sin embargo, durante la sesión controlada en el Centro de Recursos Familiares del Sur de la Florida, ubicado en la SW First Street, tomó al menor y escapó del lugar a pie, desatando una alerta de secuestro que fue difundida a nivel estatal.
El personal asignado a monitorear el encuentro relató que la cubana actuó de forma abrupta y corrió en dirección este.
Aunque intentaron seguirla, desapareció de su vista al llegar cerca de la Avenida 13 del suroeste. Poco después, la policía de Miami accedió a un video de vigilancia que confirmaba la huida de la mujer con el niño cargado en brazos.
El punto de quiebre en la operación ocurrió alrededor de la 1:00 a.m., cuando la propia Figueroa León realizó una llamada grabada a la Oficina del Sheriff de Miami-Dade preguntando el motivo por el cual estaba en Alerta Amber.
La comunicación permitió rastrear su localización hasta los alrededores de la Avenida 14 del noreste, cerca de Ives Dairy Road, donde oficiales la interceptaron y aseguraron al menor sin reportes de lesiones.
La cubana fue formalmente arrestada y llevada al Centro Correccional Turner Guilford Knight. En la audiencia posterior, la jueza Mindy S. Glazer denegó su liberación sin fianza y le impuso una caución de 2,500 dólares.
Durante el interrogatorio, se le leyeron sus derechos en español y decidió no emitir declaraciones.
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Investigaciones previas indicaron que la mujer no vivía con el niño, y vecinos del domicilio que ocupó hasta hace poco señalaron que dejó de pagar alquiler y enfrentó un proceso de desalojo desde abril.
Las autoridades aclararon que, aunque ella no había incumplido las visitas anteriores, se trató del primer intento de llevarse al niño sin autorización judicial.
Redacción de Cubanos por el Mundo
