Donaida Pérez Paseiro, presa política cubana, enfrenta un alarmante deterioro en su estado de salud dentro de la prisión de Guamajal, en Villa Clara, donde se encuentra recluida.
La activista ha sufrido una fuerte recaída, marcada por una considerable baja de hemoglobina y episodios frecuentes de desmayos, según denunció a Martí Noticias su cuñado Jorge Luis García Pérez, conocido como Antúnez.
De acuerdo con información, los médicos del penal han reconocido la gravedad de su condición, pero se declararon incapaces de intervenir sin una autorización previa de la Seguridad del Estado.
“Los médicos de la prisión, aunque reconocen la gravedad de la situación, dicen que muy poco o nada pueden hacer porque para trasladar a un preso político a un hospital tiene que ser con el permiso de la Seguridad del Estado”, afirmó Antúnez.
Como se recordará, la presa política fue condenada a ocho años de cárcel tras su participación en las protestas del 11 de julio de 2021.
Aunque en enero pasado salió de prisión bajo libertad condicional, esta medida fue revocada el 11 de junio tras su detención al acudir a una citación en la misma cárcel donde se encuentra su esposo, Loreto Hernández, quien cumple una condena de siete años por los mismos hechos.
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Su nueva encarcelación fue justificada por las autoridades debido a supuestos incumplimientos de las condiciones impuestas; en pocas palabras, excusas sin sentido para devolverla a las mazmorras sin merecerlo.
“Yo sé que eso no ha sido más que el resultado de la campaña internacional que se ha hecho a favor de nosotros los presos políticos, que no tiene nada que ver con lo que haya hecho el régimen cubano. El régimen cubano, simplemente, nos utiliza como su moneda de cambio para que Cuba fuera sacada de la lista de los países terroristas”, declaró Pérez Paseiro a comienzos de año, luego de aquella excarcelación.
Antúnez, quien ha seguido de cerca su situación, alertó sobre la urgencia de una atención médica adecuada.
“Está en estos momentos sufriendo una fuerte recaída y afrontando una seria bajada de la hemoglobina, lo que le ocasiona fuertes desmayos”, insistió.
Donaida Pérez Paseiro es solo una de las tantas personas que se encuentran secuestradas por la dictadura castrista en la isla, únicamente por hacer uso de su derecho a la libertad de expresión.
Mientras esto ocurre, las calles del país siguen dominadas por una delincuencia imparable, cuyos perpetradores de crímenes saben que pueden actuar con total libertad, ante la mirada de una policía que lo único que hace es reprimir a inocentes.
Redacción de Cubanos por el Mundo
