Los hijos de José Daniel Ferrer fueron testigos directos de la detención de su madre, Nelva Ortega Tamayo, en las afueras del penal de Mar Verde, en Santiago de Cuba.
Como se recordará, la escena ocurrió el 1 de julio, mientras la mujer intentaba obtener información sobre la situación médica de su esposo, encarcelado en ese centro penitenciario.
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Según detalló Martí Noticias, Ortega estaba acompañada por su hija Fátima Victoria y su hijo menor, Daniel José, cuando esbirros del régimen castrista la interceptaron.
El operativo policial fue ejecutado sin contemplaciones, incluso ante la mirada desconcertada de los menores.
“Varios policías y el carro de patrulla. Antes de que me metieran en el carro, le grito a Fátima para que sepa que me van a detener”, relató Ortega.
La situación escaló rápidamente cuando intentó que su hijo subiera con ella al vehículo oficial. “Ella sale con Danielito y ya estaba metida en el carro. En el momento que le digo que abra, que entre el niño, que tiene que estar conmigo, la misma represora de Menores le arrebató al niño, cogió al niño”, denunció.
El hijo pequeño de José Daniel Ferrer fue arrancado de sus brazos sin previo aviso, hasta que Fátima, en medio del forcejeo, logró rescatarlo.
“Imagínense con su madre dentro de una patrulla, una señora que no conoce sujetándole. Fátima se lo arrebató, porque una de las cosas que le dije a Fátima es que cogiera a su hermano, que nadie lo tocara”, contó al medio citado.
Ortega había acudido a la prisión en busca de información tras semanas sin noticias sobre Ferrer, quien lleva días en huelga de hambre y ha sido agredido dentro del penal.
La mujer señaló a los oficiales “Michel” y “Mario Rasiel Soblariz Garcés” como responsables del hostigamiento, en un contexto donde también recibió amenazas de perder la custodia de su hijo.
“Podría ir presa, simplemente por preguntar el estado de salud de mi esposo”, expresó.
Aunque la detención de Ortega ya se había producido previamente, la violencia y el trauma generados frente a sus hijos volvieron a poner en evidencia el nivel de represión ejercido por el régimen, incluso contra familias completas.
En cuanto a José Daniel Ferrer, este sigue siendo torturado brutalmente por los esbirros del penal de Mar Verde, donde lo mantienen secuestrado.
Pese a todo el maltrato que lleva años sufriendo, el líder opositor sigue firme en sus ideales, y ha manifestado en reiteradas ocasiones que prefiere incluso la muerte antes de agachar la cabeza ante la dictadura.
Redacción de Cubanos por el Mundo
