Luego de prácticamente una semana sin tener noticias suyas, la familia del líder opositor, José Daniel Ferrer, finalmente pudo obtener una prueba de vida.
Así lo contó la hermana del preso político, Ana Belkis Ferrer, a través de las redes sociales, acotando que este pudo ver – por un corto tiempo y bajo presencia de los esbirros – a su esposa, Nelva Ortega.
“Aproximadamente a las 4:00 pm de este lunes, 14 de julio, dieron fe de vida de José Daniel Ferrer, solo a Nelva le permitieron verlo y bajo la presencia del represor del G2 conocido como Julio Fonseca”, escribió.
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Trascendió que, durante esa visita cuyo plazo fue de aproximadamente una hora, se pudo confirmar que la situación de Ferrer no ha cambiado casi nada, salvo por las crueles torturas que ha tenido que padecer en las últimas semanas.
“Durante el encuentro de aproximadamente una hora confirmó que todo continúa igual, excepto las salvajes golpizas y las torturas extremas, las cuales de momento recesaron”, agregó.
No obstante, las condiciones infrahumanas en las que se encuentra dentro de la prisión de Mar Verde, en Santiago de Cuba, siguen siendo un tema de suma preocupación. No solo tiene que lidiar con mosquitos, moscas o chinches, sino que, para colmo de males, está recluido con otros reos al servicio del régimen.
En cuanto a su estado físico, los dolores de cabeza, de garganta, músculos y articulaciones, así como problemas graves en los oídos, siguen aquejando al líder opositor.
“Sin atención médica, obligado a tomar agua sucia y contaminada al no permitir la entrada de agua purificada”, denunció Ana Belkis.
Como se recordará, José Daniel Ferrer fue encarcelado nuevamente luego de que el régimen argumentara excusas baratas como “incumplir” las condiciones de ese excarcelamiento que se produjo a comienzos de año tras un acuerdo entre la dictadura y la administración de Joe Biden, mediado por el Vaticano.
Redacción de Cubanos por el Mundo
