Un voraz incendio forestal ha consumido más de 80 hectáreas de bosques en la zona montañosa de Ojo de Agua, en el municipio de Niceto Pérez, provincia de Guantánamo, según informaron fuentes oficiales.
Este siniestro ha puesto en alerta a las autoridades locales y nacionales, que luchan por controlar las llamas en un contexto de sequía extrema y condiciones climáticas adversas.
El fuego se ha propagado rápidamente debido a las altas temperaturas, la baja humedad relativa y los fuertes vientos que azotan la región. El terreno montañoso y de difícil acceso ha complicado las labores de extinción, que involucran a más de 100 efectivos, incluyendo miembros del Cuerpo de Guardabosques, las Fuerzas Armadas y brigadas locales.
Según los reportes, se han implementado estrategias como la creación de cortafuegos y el uso de un helicóptero enviado por el Ejército Oriental para apoyar las operaciones de contención, tomando en cuenta que desde hace más de 35 años no se registraba un incendio forestal en esa zona.
“Las condiciones climáticas y la topografía han hecho de este incendio un desafío significativo. Estamos trabajando sin descanso para proteger los ecosistemas y evitar que el fuego avance hacia otras áreas,” afirmó el jefe del grupo de protección del Cuerpo de Guardabosques, Rafael Wilson Castellanos.
El impacto ambiental del incendio es alarmante. La pérdida de más de 80 hectáreas de bosque ha generado una devastación significativa en la biodiversidad local, con efectos que incluyen la degradación del suelo, la contaminación de fuentes de agua y la destrucción de hábitats de especies nativas.
Este siniestro se suma a una crisis de incendios forestales que azota a Cuba en 2025, con la provincia de Pinar del Río liderando las estadísticas nacionales al registrar 95 incidentes que han arrasado con 8 mil 068 hectáreas de bosque en los primeros cinco meses del año.
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Redacción Cubanos por el Mundo
