Apenas horas duró la libertad del activista y preso político cubano Mario Alberto Hernández Leyva, quien fue detenido nuevamente este jueves 14 de agosto, el mismo día que concluía una condena de dos años de prisión.
Ahora, las autoridades del régimen castrista pretenden achacarle un nuevo cargo por el supuesto delito de “desobediencia”, otro más de los tantos inventados a su más pura conveniencia para secuestrar a quienes se atreven a alzar la voz en su contra.
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El opositor, quien es Vicepresidente del MONR, Delegado del MD y promotor de Cuba Decide, fue interceptado por la Seguridad del Estado justo al salir de la Prisión 1580 en San Miguel del Padrón.
De acuerdo con la información proporcionada justamente por Cuba Decide en Facebook, Hernández Leyva fue trasladado de inmediato al centro de detención VIVAC, localizado en Calabazar, Boyeros.
En ese sentido, su familia informó que esta nueva acción judicial ocurre a pesar de que el preso político ya cumplió de manera íntegra la sanción anterior.
Este hecho representa una grave violación de sus derechos fundamentales, especialmente considerando que Hernández Leyva es beneficiario de una Medida Cautelar otorgada por la CIDH.
“Denunciamos esta detención arbitraria y el uso reiterado de acusaciones ya cumplidas para mantenerlo privado de libertad. Exigimos la atención urgente de los organismos internacionales de derechos humanos ante esta grave violación de sus derechos fundamentales”, escribió la organización en la publicación.
De esta manera, el régimen castrista vuelve a ejecutar un aberrante acto de injusticia contra quien no lo merece, al mismo tiempo que los verdaderos delincuentes actúan a sus anchas por las calles del país, sin ser perseguidos por absolutamente nadie, matando, robando, violando, y cometiendo cualquier tipo de atrocidad.
Redacción de Cubanos por el Mundo
