Por segunda ocasión consecutiva, la Dama de Blanco Sonia Álvarez Campillo no pudo realizar la visita familiar a su hija, la prisionera política Saylí Navarro, debido a una prohibición de ingreso al centro penitenciario La Bellotex, en Matanzas.
Las autoridades de la prisión, encabezadas por la jefa de la unidad, Martha Cristina Hernández Bacallao, han justificado la medida en distintas ocasiones con diversos argumentos.
La más reciente negativa, ocurrida el pasado martes, se fundamentó en una supuesta cuarentena por un brote de chikungunya en la localidad de Perico, según informó Martí Noticias.
Saylí Navarro, quien cumple una condena de ocho años de cárcel por su participación en las protestas del 11 de julio de 2021, ya había enfrentado una situación idéntica el 31 de julio, cuando se le impidió el contacto familiar bajo el mismo pretexto.
Álvarez Campillo cuestionó la veracidad de la justificación sanitaria. “Hace dos visitas que no me dejan entrar a la prisión. No me dejaron entrar porque dicen que Perico estaba en cuarentena por el virus ese que anda, que ese virus está en toda Cuba, no está solo en Perico”, declaró la Dama de Blanco.
Para sustentar su reclamo, la madre de la presa política contrastó la situación con la de otro centro penitenciario cercano. “Aquí, en Canaleta, en la prisión que está aquí mismo, en el poblado de Perico, los presos tuvieron visitas y dejaron entrar a todos los familiares. Y allí (en la Bellotex) no me dejaron entrar a mí. A todos los demás familiares los dejaron entrar”, argumentó.
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Cabe recordar que el padre de Saylí, el líder opositor Félix Navarro, también está secuestrado por el régimen castrista en precarias condiciones de salud que ponen en riesgo su vida.
La situación de padre e hija deja justamente a Sonia Álvarez Campillo, luchando incansablemente por hacer justicia.
Redacción de Cubanos por el Mundo
