Un hombre de Apopka, en Florida, se recupera de las lesiones sufridas después de que un oso negro lo atacara en su propiedad el pasado 15 de agosto.
El suceso, ocurrido en las inmediaciones de Wekiva Springs, ha provocado una investigación oficial por parte de las autoridades de vida silvestre y ha dejado al residente, Alexander Rojas, con secuelas físicas y temor a regresar a su domicilio.
La Comisión de Conservación de Pesca y Vida Silvestre de Florida (FWC) confirmó a la prensa local que sus agentes están investigando activamente lo que han denominado un “incidente entre humanos y osos”.
Como parte de su protocolo, el personal de la FWC se presentó en el vecindario de Rojas para instalar trampas con el objetivo de capturar al animal involucrado y trasladarlo a otra área.
El violento episodio tuvo lugar alrededor de las cuatro de la madrugada, cuando Rojas salía de su casa y se encontró con dos osos jóvenes en su patio.
Según su testimonio, uno de los animales se volvió impredeciblemente agresivo. “Por alguna extraña razón, se dio la vuelta, dio más pasos vacilantes hacia mí, me mordió el brazo y luego me arañó las costillas”, relató Rojas.
Tras lograr zafarse del animal, Rojas huyó corriendo por la calle para ponerse a salvo. “Llamé a mi novia y ella me escuchó gritar y le dije que me trajera toallas, estaba sangrando por todo el suelo”, explicó.
La gravedad de las heridas requirió atención médica de urgencia, donde fue tratado por las mordeduras y arañazos.
En el centro médico, los facultativos le administraron las vacunas contra el tétanos y la rabia. Actualmente, la situación de Rojas es delicada, ya que no cuenta con seguro médico para afrontar los gastos derivados del ataque.
Ante la posibilidad de daños serios, sus médicos le han aconsejado consultar a un especialista. “Me recomendaron a un cirujano de mano solo porque tengo poca función entre estos dos dedos”, indicó, señalando que teme que un tendón o un nervio resultara afectado.
Para poder costear el tratamiento, su familia ha iniciado una recaudación de fondos a través de la plataforma GoFundMe.
El miedo generado por el ataque ha sido tan grande que Rojas ha decidido no volver a su vivienda en esa región de Florida, incluso si el oso es capturado.
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La FWC reitera a los ciudadanos la importancia de mantener la distancia con la fauna salvaje y reportar cualquier encuentro que represente una amenaza.
La agencia insta a la comunidad a contactar su línea directa de alerta de vida silvestre al 888-404-FWCC (3922) ante osos que parezcan enfermos, heridos, o si se es testigo de actos de agresión o alimentación intencionada hacia estos animales.
Redacción de Cubanos por el Mundo
