El líder opositor cubano, José Daniel Ferrer, expuso las fracturas internas que debilitan la lucha contra la dictadura castrista, al denunciar una campaña de difamación en su contra orquestada ya no solo por el régimen, sino por individuos que también se hacen llamar defensores de una Cuba libre.
El contundente mensaje fue emitido por el propio activista mediante una publicación en su cuenta personal de la red social Facebook.
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En el texto el disidente traza una línea divisoria fundamental: considera lógicas y hasta esperables las calumnias provenientes de los agentes de la tiranía, a quienes describe como peones que actúan bajo presión, miedo y chantaje.
Sin embargo, expresa una profunda preocupación ante los ataques de quienes, presuntamente, comparten su mismo objetivo de librarse de las garras del régimen, atribuyendo estas acciones a motivaciones tan bajas como la envidia y las prioridades torcidas.
“Que me calumnie y difame un agente de la tiranía, lo entiendo, le pagan para que lo haga, y vive bajo presión, miedo y chantaje. Pero que me calumnie y difame alguien que quiere, como yo y muchos, la libertad de Cuba y el fin de la tiranía, que viene a ser lo mismo, no puedo entenderlo”, manifestó José Daniel Ferrer.
Lejos de adoptar un rol de víctima, el líder de la UNPACU confronta directamente a sus detractores del exilio y la oposición. Con la autoridad moral que le confieren tres décadas de lucha ininterrumpida dentro de la isla, les lanza un desafío: si la envidia es el motor de sus ataques, que demuestren un valor similar enfrentando directamente a la dictadura en su propio terreno, como él lo ha hecho.
“Yo solo soy un humilde guajiro de Palmarito de Cauto, que ha pasado más de 12 años en prisión en medio de terribles condiciones, que ha sufrido muchos golpes, torturas y humillaciones, que tiene récords en Cuba de detenciones y asaltos a su hogar”.
“Creo que en vez de atacarme sin razón, más de lo que combaten a la tiranía, si la cuestión es de envidia, que hagan en Cuba lo que humildemente hice durante 30 años y les quedaría más bonito”, aseveró el ahora ex prisionero político.
Finalmente, Ferrer advierte que esta campaña de desprestigio interna resulta contraproducente para sus propios autores, socavando la causa común y fortaleciendo indirectamente al régimen.
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En ese sentido, reafirma con total convicción su compromiso inquebrantable de permanecer, junto a otros cubanos dignos, en la batalla por la libertad y la prosperidad de la isla.
Como se recordará, José Daniel Ferrer llegó hace poco más de una semana a Miami acompañado de su familia, siendo esta el principal motivo del opositor de aceptar el exilio, pues la dictadura mantenía a todos sus seres queridos bajo una amenaza constante.
Redacción de Cubanos por el Mundo
