Varias aerolíneas internacionales cancelaron sus operaciones hacia Venezuela en respuesta a una advertencia emitida por la Administración Federal de Aviación de Estados Unidos (FAA) que destaca los peligros crecientes para la aviación civil en el espacio aéreo del país sudamericano.
Esta medida, que afecta al menos a seis compañías aéreas, se produce en medio de un escalamiento de tensiones entre Washington y la dictadura de Nicolás Maduro, marcado por un aumento en la actividad militar regional.
Vale recordar que, la FAA publicó el viernes 21 de noviembre un aviso de seguridad dirigido a las aerolíneas estadounidenses y a operadores extranjeros, alertando sobre una “situación potencialmente peligrosa” en Venezuela debido al “deterioro de la situación de seguridad y el incremento de la actividad militar en o alrededor del país”.
Entre los riesgos específicos mencionados se encuentran interferencias en el Sistema Global de Navegación por Satélite (GNSS) detectadas desde septiembre, ejercicios militares masivos, movilización de miles de fuerzas armadas y reservas, así como la presencia de aviones de combate avanzados y sistemas antiaéreos capaces de alcanzar altitudes de aeronaves civiles.
Aunque el aviso aclara que Venezuela no ha manifestado intenciones de atacar la aviación comercial, insta a los pilotos a ejercer “precaución extrema” en todo el territorio aéreo venezolano. En consecuencia, al menos tres aerolíneas han suspendido vuelos directos desde y hacia Caracas para este sábado 22 de noviembre y días subsiguientes.
TAP Air Portugal, la compañía bandera de Portugal, canceló sus servicios programados para el sábado y el martes próximo, citando explícitamente la información de la FAA como motivo principal. De manera similar, la brasileña Gol y la colombiana Avianca detuvieron sus operaciones en el Aeropuerto Internacional Simón Bolívar de Maiquetía, según datos de seguimiento de vuelos como Flightradar24.
Otras aerolíneas afectadas incluyen a la española Iberia, que también ha pausado rutas hacia Venezuela sin fecha de reanudación definida, elevando el total de suspensiones a seis aerolíneas mayores.
Por su parte, las estadounidenses American Airlines y Delta Air Lines habían suspendido previamente los sobrevuelos de Venezuela en octubre y meses anteriores, respectivamente, como medida preventiva ante las crecientes inquietudes de seguridad.
Este episodio se enmarca en un contexto de deterioro diplomático entre Estados Unidos y Venezuela, exacerbado por la llegada de la Armada estadounidense al Caribe.
El pasado 16 de noviembre, el portaaviones USS Gerald R. Ford, acompañado de un grupo de ataque que incluye al menos ocho buques de guerra, un submarino nuclear y aviones F-35, se desplegó en la región como parte de una “nueva fase de operaciones” contra la dictadura de Maduro, según fuentes cercanas al Pentágono. Washington ha intensificado sus acciones contra narcotraficantes vinculados al régimen, con al menos 21 ataques aéreos desde septiembre que han resultado en la muerte de más de 80 personas en embarcaciones sospechosas de transportar drogas desde costas venezolanas.
Por su parte, el presidente Donald Trump ha ofrecido una recompensa de 50 millones de dólares por la captura de Maduro, a quien acusa de nexos con el crimen organizado, y jefe del Cartel de los Soles.
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Redacción Cubanos por el Mundo
