Un nuevo acto de vandalismo sacudió el transporte interprovincial en Cuba, cuando un ómnibus fue atacado con piedras, dejando afortunadamente solo daños materiales, pues no se registraron lesionados entre los pasajeros o el personal a bordo.
El incidente trascendió a través de una publicación en la página de Facebook Transportación Habana TH, la cual señaló que el violento suceso ocurrió en la Carretera de Vado del Yeso, específicamente en el tramo que conecta a Las Tunas y Bayamo.
De igual forma, se conoció que la unidad afectada forma parte de la Mipyme PEDROCARR SRL, que en los últimos días ya ha sido seriamente perjudicada por la imparable delincuencia.
“Afortunadamente, no se reportan pasajeros ni trabajadores heridos, aunque el hecho genera una profunda preocupación por la seguridad de quienes utilizan este medio de transporte”, señala el citado perfil.
Este ataque no es un hecho aislado, sino que se suma a otro episodio de idénticas características ocurrido hace apenas pocos días, cuando el ómnibus de la misma empresa, que realizaba la ruta entre Santiago de Cuba y La Habana, fue apedreado en la carretera de Contramaestre.
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La repetición de estos eventos en menos de una semana confirma una alarmante escalada de la delincuencia en las carreteras cubanas, una situación que pone en jaque la seguridad de miles de viajeros y que afecta de manera directa la operatividad del ya deficiente sistema de transporte, exponiendo la vulnerabilidad de quienes intentan movilizarse por la isla.
Lo peor del caso es que el régimen, como de costumbre, no se preocupa ni siquiera en buscarle una mínima solución a este problema, enfocándose únicamente en la represión violenta contra quienes salen a las calles a reclamar por este tipo de atrocidades, que cada vez se reportan con más frecuencia.
Redacción de Cubanos por el Mundo
