El aparato represivo del régimen en la provincia de Granma concretó una nueva injusticia contra la disidencia al dictar una condena de siete años de privación de libertad contra el activista Alexander Verdecia Rodríguez, castigo que se oficializó mediante una sentencia firme emitida por el Tribunal Provincial tras un proceso judicial que tardó tres meses en resolverse.
La confirmación del veredicto llegó a través de una comunicación telefónica que el prisionero político sostuvo con su esposa, Elianni Villavicencio, quien a su vez denunció ante Martí Noticias la arbitrariedad de una medida que busca castigar el pensamiento libre y criminalizar el reclamo de derechos fundamentales.

Este activista de 51 años e integrante de la Unión Patriótica de Cuba (UNPACU), paga el precio de disentir en una isla secuestrada por la dictadura, pues permanece encerrado desde el pasado 6 de febrero en la cárcel de Las Mangas en Bayamo.
Para la fiscalía comunista, las publicaciones digitales de Verdecia constituyeron delitos de “propaganda contra el orden constitucional” e “instigación a delinquir”, argumentando que sus mensajes buscaban alterar la paz en Río Cauto y promover la rebelión contra los dirigentes.
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Esta narrativa contrasta con la realidad expuesta por su familia al señalar que el opositor solo exigía el fin de los apagones, mejores salarios y el cese del hambre y la miseria, como la gran mayoría de los habitantes de Cuba.
“Por el simple hecho de publicar en Facebook su forma de pensar, por exigir libertad y justicia para el pueblo de Cuba, por exigir mejores salarios, mejores condiciones de vida para el pueblo cubano, por exigir no más apagones, no más hambre, no más miseria. Y ha sido sancionado injusta y arbitrariamente”, fueron las palabras de Villavicencio al medio citado.
Esta sentencia representa el sexto castigo penal que enfrenta Verdecia Rodríguez a manos de los tribunales castristas, consolidando un patrón de acoso y ensañamiento judicial contra un ciudadano cuyo único delito consistió en desafiar a la tiranía y exponer las carencias que sufren los cubanos.
Redacción de Cubanos por el Mundo