Todos los días, Jorge Luis sale en su bicitaxi ofreciendo el servicio a turistas y propios en La Habana. Sus años ya no le permiten realizar el mismo recorrido de antes, pero el poco dinero que logra hacer le alcanza para sobrevivir en una economía paupérrima y llena de controlas.
Jadeando va dialogando con una periodista que le pregunta ¿como es ser cuentapropista en Cuba?
“El cuentapropista es el que le paga al Estado para trabajar, 80 pesos mensuales y 375 el trimestral. Nos tienen puestas muchas limitaciones, en mi caso no me dejan circular por ciertas partes, los miembros de la policía no asedian, en muchos casos nos maltratan”
Jorge Luis asegura que los funcionarios hacen lo que quieren con ellos y el régimen se los permite.
“Nos ponen multas excesivamente grandes, de 600 pesos en adelante. Nos tienen ahogados”
Durante el recorrido realizado por la periodista a bordo del bicitaxi, pudo constatar la realidad de otros cuentapropistas.
El bicitaxista continuaba conversando con la mujer, afirmando que la culpa de los excesivos controles impuestos era de los funcionarios del régimen y no del dictador, Raúl Castro.
“Hay cosas aquí que el presidente no sabe, los de abajo son los que hacen todas esas cosas malas de corrupción, a esos si son contrarrevolucionarios, no nosotros que pagamos nuestra licencia para trabajar”
Cuando se le pregunto sobre la muerte de Fidel Castro, este afirmó sentir “temor” por lo que pudiera pasar de ahora en adelante.
“La diferencia entre Raúl y Fidel es que Raúl autorizó los negocios personales. Hay muchas cosas que yo no compartía con Fidel pero me da pena que se haya ido. Ahora con la muerte de él estamos desprotegidos”.
La periodista le pregunta si teme que los nuevos políticos le quiten lo que Fidel hizo.
“Es que nunca tuvimos nada, sólo tranquilidad, educación y salud, pero de resto nada más”
