La Guardia Nacional Bolivariana (GNB) y la Policía Nacional Bolivariana (PNB) hacen la tarea al revés, por lo que el Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos pidió al Gobierno de Nicolás Maduro que se respete el derecho a la manifestación pacífica y la liberta de expresión de los venezolanos y hace un llamado “a todas las partes” a renunciar a la violencia.
Las marchas en Venezuela, desde hace algunos años, reflejan el carente respeto a la libre expresión y al derecho a manifestarse en las calles.
“Estamos preocupados por los informes sobre (actos de) violencia durante las protestas. Hacemos un llamamiento al Gobierno de Venezuela para que se asegure que sean respetados el derecho a la manifestación pacífica y a la libertad de opinión”, dijo Elizabeth Throssell, portavoz del alto comisionado, en un comunicado.
El caso de inhabilitación por 15 años, para el líder opositor Henrique Capriles, gobernador del estado Miranda, también fue tomado en cuenta, por lo que Throssell recordó que el político ha sido “democráticamente elegido” y por más de dos décadas ha estado en actos políticos.
En Caracas los últimos días han sido de protestas, al igual que en otras regiones del Estado venezolano, en respaldo a la Asamblea Nacional (AN), en exigencia de las elecciones y en rechazo a los magistrados del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ), a los que además buscan su destitución.
Pero las manifestaciones han pasado de pacíficas a centros de confrontaciones entre los cuerpos de seguridad y la sociedad civil en general, por lo que la portavoz hizo un llamamiento “a las fuerzas de seguridad para que operen en concordancia con los estándares internacionales sobre derechos humanos” en sus acciones para “gestionar” las manifestaciones. En las que la represión con perdigones y bombas lacrimógenas no cesan.
De igual manera se dirigió a los simpatizantes que hacen protestas en las calles a que “usen medios pacíficos para hacer oír sus voces”, y a todos los implicados les pidió renunciar a la violencia.
La Oficina del alto comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Zeid, Ra’ad Al Hussein, pidió “una investigación independiente” sobre la muerte de Jairo Ortiz, de 19 años, tras manifestaciones acaecidas la semana pasada en el municipio Carrizal, en el estado Miranda.
Redacción CPEM / Con información de el Nuevo Herald
