El temor por el periodismo independiente se hace más evidente en la Cuba comunista. Durante el fin de semana, cinco periodistas sufrieron duras represalias por parte del régimen castrista, incluso sitiaron la sede de la Asociación Pro Libertad de Prensa (APLP), como si de un fuerte enemigo se tratase.
En el operativo estuvieron presentes fuerzas represivas de la Seguridad del Estado y la Policía Nacional Revolucionaria, juntos actuaron contra los profesionales para amedrentarlos y evitar que sigan ejerciendo sus funciones mediante la intimidación
En el operativo, fueron visitados y advertidos los periodistas Tania Díaz Castro, Daniel González Oliva, Manuel Guerra Pérez, Alejandro Hernández Cepero y Osniel Carmona Breijo, quienes asistirían al lanzamiento de una nueva revista independiente llamada “Identidades“.
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José Antonio Fornaris, presidente de APLP, indicó que la noche del 19 recibió una llamada telefónica de parte del Oficial del DSE llamado Roberto, para informarle que el cuerpo represivo había decidido no permitir que se efectuara la reunión.
“En la mañana amaneció frente a la casa la patrulla 148 de la policía, para impedir que nadie pudiera entrar”.
Por su parte, Hernández Cepero tuvo que comparecer la mañana del 20 a un citatorio en la Cuarta Estación de la PNR, en el municipio Cerro, donde, a modo de intimidación, el oficial Lucas del DSE le insinuó que si continuaba ejerciendo el periodismo podía “terminar como los periodistas de México, muerto”.
A estos sucesos se suma la detención el sábado 20 en el parque de la capitalina Avenida de los Presidentes de un grupo de activistas del Partido Unión por Cuba Libre (PUNCLI) que también intentaba celebrar el Día de la Independencia cubana.
Redacción Cubanos por el Mundo / Con información de CubaNet
