Meses de espera y una promesa que tardó en llegar pero está cerca. En los próximos días los migrantes cubanos que permanecían en Panamá, tendrán la oportunidad de regresar de nuevo a la isla, una vez que el gobierno de Juan Carlos Varela solvente la entrega de los pasajes aéreos, reseña Panamá América.
El viceministro de Seguridad de ese país, Jonattan Del Rosario, había informado que el albergue de Gualaca cuenta con 75 ciudadanos cubanos, quienes al final han aceptado la propuesta de repatriación voluntaria que les brinda el Gobierno panameño, que incluye además una ayuda económica para abrirse paso como emprendedores, propuesta que tendrá que sortear las nuevas regulaciones del régimen cubano en esa materia.
Actualmente, para los migrantes el único camino es volver a Cuba, ante las pocas posibilidades de un estatus migratorio por su ingreso al país ilegal, por “trochas”, y por ende “no existe ninguna opción migratoria de las que contempla la ley y la Constitución”.
El Gobierno coordina la logística de su traslado, lo que permitiría que “los primeros cubanos comiencen, la próxima semana, a salir del país”.
Sin embargo, el gobierno de Panamá ha asegurado que se trata de un proceso que “llevará tiempo” haciendo averiguaciones y conversaciones con los encargados de Cuba en el consulado de la embajada, para así cumplir con las normas legales.
¿Qué ofrece Panamá?
La propuesta de Panamá consiste en darle un bono de 1,600 dólares a cada extranjero, siempre y cuando asegurara que va a abordar el avión que lo llevará a Cuba, viaje que también sería costeado por su gobierno, además de una visa de múltiples ingresos.
Durante el 2016, fueron trasladados 129 cubanos al albergue de Gualaca, tras su ingreso por la Selva de Darién, en su tránsito irregular desde Colombia hasta Costa Rica, en dirección hacia los Estados Unidos, pero no se les permitió el paso en el país vecino.
Tras ello, las autoridades advirtieron a los cubanos que si abandonaban el albergue serían detenidos y deportados a Cuba.
Posteriormente, los 75 cubanos aceptaron regresar a la isla de Cuba, tras el acuerdo con el Gobierno panameño y así buscar una solución a la situación migratoria.
Por su parte, el gobernador de Chiriquí, Hugo Moreno, explicó que se coordinará el traslado de los cubanos a Panamá para ser enviados de vuelta a su país y entregarles el bono.
Cifras oficiales de Migración han corroborado el paso en el 2016 de más migrantes irregulares, en su mayoría cubanos, pero también haitianos, africanos y asiáticos, que han ingresado a través de la selva del Darién, en la frontera con Colombia, debido a su tránsito hacia Estados Unidos.
Redacción Cubanos por el Mundo
