El presidente venezolano, Nicolás Maduro, pidió este sábado al recién liberado líder opositor Leopoldo López un “mensaje de rectificación y paz”.
Durante un acto público, que fue transmitido tanto por la radio como por televisión, Maduro afirmó que “ojalá esta medida (…) sea entendida y el señor LL (así se refirió al dirigente opositor), después de casi cuatro años en Ramo Verde, lance un mensaje de rectificación y de paz, porque el país quiere paz”.
Además, aprovechó su intervención para afirmar que él nunca estuvo envuelto en el encarcelamiento de López, ocurrido en 2014 tras unas protestas que dejaron 43 muertos. El líder opositor fue condenado a 13 años y nueve meses acusado de instigamiento.
“Acato la decisión y, digo más, apoyo la decisión (…) y ustedes saben las diferencias absolutas y profundas que tengo con el señor LL”, subrayó desde un estrado frente a un grupo de chavistas en Puerto La Cruz (en el estado de Anzoátegui).
El líder chavista afirmó que la salida de la cárcel de López, que ahora se encuentra en arresto domiciliario, es una prueba de la “independencia” del Tribunal Superior de Justicia de Venezuela.
En su intervención, Maduro recalcó que la decisión de que López fuera encarcelado fue de la fiscal Luisa Ortega, considerada una pieza clave en el chavismo hasta hace poco, que ha comenzado a criticar al régimen y la Constituyente, el proceso impulsado por Maduro para amoldar la Constitución a los principios chavistas.
“Él está procesado, penado y preso por responsabilidad de la Fiscalía (…) Yo jamás moví ni un dedo, porque jamás he intervenido en las decisiones del Ministerio Público”.
Por su parte, Leopoldo reafirmó su compromiso al salir de prisión. “No estoy dispuesto a claudicar en mi lucha”, fueron las primeras palabras al salir de Ramo Verde.
Ortega responde
Por su parte, Ortega declaró este sábado que “la libertad de los venezolanos no puede depender de negociaciones políticas”. La fiscal, en una entrevista con el diario La Tercera, sostuvo que hay que “tener cuidado en el contexto en el que se toman estas decisiones” ya que el país se encuentra en “una crisis política y de una profunda falta de credibilidad y de respeto hacia el Tribunal Supremo de Justicia”.
Ortega, que ha sido calificada ahora como “fiscal rebelde” declaró que “no se puede usar a las personas privadas de libertad como si fuesen unos rehenes que pueden ser objeto de negociación, tal como lo hacen algunos grupos delictivos con las personas que secuestran”. En la entrevista señaló que “no se debe instrumentalizar un caso tan delicado y sensible para el país para tratar de legitimarse y mejorar su imagen”.
Via: Univision
