En el reciente anuncio del Consejo de la Administración Provincial de La Habana (CAP), que contiene una serie de disposiciones que norman el funcionamiento de los paladares (restaurantes privados), se habla del orden y la disciplina con que deben de laborar estos negocios. Sin embargo, un análisis detallado de algunas de esas directivas indica que se trata, en lo fundamental, de impedir que el progreso económico de los establecimientos se les vaya de las manos a las autoridades. More