Fotorreportaje por Juan Suárez
HAVANA TIMES — Un día antes que comenzara la feria agropecuaria me encontraba conversando con un amigo y colega de Havana Times sobre este evento que se celebra cada cierto tiempo los fines de semana en la avenida de Zanja donde se vende de todo un poco, más en el comer que en otra cosa.
Él me decía que anteriormente había escrito y criticado el tema, se refería a esto como el “pan y circo” que el antiguo emperador romano le daba a su pueblo, como no había nada y de repente llegaba o se celebraba algo todos lo acogían como algo extraordinario.
Así es esta feria cubana, como el pan y el circo, como un surco de campo en medio de la ciudad. Se me ocurrió este sábado ya en la tarde tomar algunas instantáneas de este pedazo improvisado cuando casi todos vendían las últimas mercancías y recogían lo poco que quedaba para terminar dejando estelas de maíz y piña, troncos de plátanos, pedazos de yuca, malanga y una tierra colorada con cajitas de comida vacías en las puertas de los vecinos asombrados de tanto reguero.
Ya al final de mi recorrido se oía la sirena de un carro patrullero y varios policías corriendo hacia una esquina, un tumulto de personas gritaba, pasé cerca y tenían a alguien esposado, no pregunté qué pasó, solo pensé, fin de la función. ¿Cuándo será el próximo circo?
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