El Reino Unido votará el miércoles si bombardea o no al llamado Estado Islámico también en Siria. David Cameron necesita el aval del Parlamento para extender las acciones militares que la fuerza aérea británica ya realiza desde 2014 en Irak.
Cameron estima que los yihadistas suponen una amenaza directa para Gran Bretaña. Aseguró que “este problema no tiene una solución militar, por eso las medidas que vamos a tomar forman parte de una estrategia más ámplia, una estrategia más ámplia, una estrategia política, diplomática y humanitaria”.
Para el Primer Ministro Britanico, “al final, la respuesta a lo que ocurre en Irak y Siria es la misma. Necesitamos gobiernos fuertes que representen a toda su gente: suníes, chiíes, cristianos y drusos”