Un grupo de Damas de Blanco y miembros de la Unión Patriótica de Cuba (UNPACU) fueron detenidos esta mañana en La Habana por intentar asistir al juicio contra la activista Jaqueline Heredia Morales, acusada de “desacato”, informaron a DIARIO DE CUBA el exprisionero político del Grupo de los 75 Ángel Moya y el opositor Antonio Rodiles.

Rodiles dijo que además de Heredia Morales iba a ser juzgada la activista María Sánchez.
Según Moya, serían alrededor de 15 los apresados por un operativo de la Policía y la Seguridad del Estado a una cuadra de un tribunal habanero. Entre ellos están la líder de las Damas de Blanco, Berta Soler, y Zaqueo Báez, uno de los activistas que fue detenido en septiembre pasado por acercarse al papa Francisco.
Todos estaban en paradero desconocido en el momento de redactar esta información.
Moya dijo que Heredia Morales, miembro de la UNPACU y las Damas de Blanco, está presa desde hace alrededor de una semana en el centro de procesamiento penal conocido como Vivac.
El juicio estaba previsto para este martes a las 10:00 de la mañana.
La UNPACU publicó un vídeo sobre Heredia Morales, madre de dos niñas, quien ha sido detenida y golpeada en varias ocasiones.
Según la organización, el arresto por el que ha sido llevada ante un tribunal se produjo cuando filmaba la acción de inspectores del Gobierno contra un bicitaxista.
“Los inspectores son corruptos, le piden dinero a (los conductores de) los carros, los bicitaxis, para no ponerles multas. Como él se ha negado, lo están reprimiendo”, dice la activista en el vídeo antes de ser arrestada.
La UNPACU publicó también imágenes que pudo grabar otro de sus miembros dentro de la unidad policial de Zanja, en La Habana, en las que se ve a Heredia Morales inconsciente en el suelo.
La organización dijo que un Policía la agarró por el cuello durante el arresto y le provocó un desmayo.
“Su activismo es la causa principal de estar en prisión bajo un cargo fabricado de desacato, cuando en realidad la activista fue brutalmente detenida”, dijo la UNPACU.
Heredia Morales había denunciado amenazas contra ella y su familia.
Según su versión, un oficial de la Seguridad del Estado le dijo que si continuaba con su activismo le podía “pasar lo peor”.