EFE.- Cuba y Estados Unidos acordaron hoy en La Habana cooperar en materia de hidrografía, geodesia y los servicios relacionados con ambas áreas, a fin de mejorar la seguridad de la navegación marítima.
La cooperación entre la Oficina Nacional de Hidrografía y Geodesia de Cuba (Onhg) y el Servicio Oceánico Nacional de la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica del Departamento de Comercio de los Estados Unidos quedó establecida a través de un memorando de entendimiento.
El documento recogió el interés común por facilitar el intercambio de información y las labores conjuntas en los campos de la cartografía náutica, los servicios geodésicos e hidrográficos, el monitoreo y el pronóstico de las mareas y las corrientes marinas, indicó un reporte de la agencia cubana Prensa Latina.
El titular de la Onhg, Cándido Regalado, explicó que este acuerdo es resultado de 13 meses de conversaciones, en un clima de “diálogo profesional y respeto mutuo”, en el contexto del restablecimiento de las relaciones diplomáticas entre Cuba y Estados Unidos.
Regalado señaló que la colaboración contribuirá a garantizar una navegación “más segura” y la protección del medio ambiente marino a favor de los dos países y de la región del Caribe.
Por su parte, el embajador en funciones de EE.UU. en Cuba, Jeffrey De Laurentis, destacó que actualmente los dos países trabajan juntos en la protección del ambiente y la salvaguarda de las áreas marinas frágiles.
Además consideró que este entendimiento ayudará a proteger vidas humanas y propiedades en el mar, así como a mejorar los servicios de navegación para los marinos mercantes y los patrones individuales de embarcaciones.
Este nuevo acuerdo entre los Gobiernos de Cuba y EE.UU. llega a solo dos días para que el presidente norteamericano Barack Obama inicie una histórica visita a la isla.
Además, se suma esta semana a la reanudación del servicio postal directo entre los dos países y a la puesta en vigor de un paquete de nuevas reglas que relajan las restricciones del embargo económico, comercial y financiero que aplica Washington a Cuba.
